Controlar a los menores y hacer que se comporten bien en clase es un reto para muchos profesores. Sin embargo, algunos de ellos utilizan unas técnicas cuanto menos sorprendentes para conseguir sus objetivos. Este es el caso de una maestra de Florida que, para evitar que una de sus alumnas de 13 años hablara en clase, la amordazó con cinta adhesiva. Ahora, la madre de la joven ha denunciado los hechos y ha solicitado una sanción disciplinaria para la docente por «abuso de poder».
Según ha relatado Jazlyn al diario Daily Mail, «Me pidió que dejara de hablar, pero pasados dos minutos comencé a hablar de nuevo tras lo cual vino a mi y me puso la cinta en la boca».
«Tenía tos por eso me quité la cinta, pero cuando ella vino a mi pupitre me volvió a poner otra cinta en la boca», ha explicado la joven, estudiante de una escuela de Florida.
Tras los hechos, la madre de la menor ha pedido que se sancione a la maestra por lo que considera un «abuso de poder».
Asimismo, la progenitora de Jazlyn ha asegurado que espera una disculpa de la escuela y que desea que el caso de su hija sirva para que no le ocurra lo mismo a ningún otro niño. EPF