Por lo general, en el momento del nacimiento el saco amniótico en el que ha crecido el bebé durante el embarazo se rompe solo. Muy pocas veces ocurre lo contrario, pero en esta ocasión el doctor ateniense Aris Tsigris lo vivió en primera persona. Y tal fue su sorpresa cuando sacó al bebé por cesárea que no dudó en inmortalizar el momento y colgar la foto de este recién nacido en su perfil de Facebook junto a la frase: «El bebé que no sabía que había nacido». Como la bolsa con el líquido amniótico aún permanecía intacta, el bebé permanecía con la sensación de continuar en el vientre materno y no era consciente de haber llegado al mundo.
El doctor cuenta, según recoge el diario The Sun, que se quedó «sin aliento» cuando comprobó que el bebé todavía se encontraba dentro del saco amniótico ya que su madre no había roto aguas. El médico resalta que en ningún momento la vida del niño corrió peligro porque se seguía alimentando de la placenta y comenzó a respirar en cuanto le rompieron el saco.