Os tengo acostumbrados a leer noticias curiosas de todos los tipos… ¿Pero como esta? La protagonista se llama Sheyla Hershey y el pasado sabado regresaba a casa conduciendo su coche tras la famosa final de la Super Bowl. De camino a Houston, donde reside, perdió el control de su vehículo y sufrió un accidente.
¿Y que pasa? Estaréis preguntándoos… Pues que la mujer salió ilesa de su coche sin un sólo rasguño. Debido a esta curiosa situación la policía supuso que llevaría el cinturón de seguridad puesto pero ella lo desmintió.
No llevaba el cinturón de seguridad puesto… ¿Entonces?. Según el relato de la señorita sus enormes pechos sirvieron para amortiguar el golpe que hubiera recibido al impactar contra el airbag de su coche. Después de ver la foto vemos que es perfectamente posible que debido a la envergadura de sus pechos es más que posible que fuese un testimonio real y no se estuviera inventando nada… ¿No creeis?
Por lo visto esta señorita se ha gastado unos 76.000 euros en “su pecho”. ¿Una buena inversión? ¿O hubiera salido infinitamente más barato abrocharse el cinturón de seguridad?