Esta es una de esas historias de amor animal que merece ser contada y conocida por todos… Su protagonista, un perro que ha estado durante una semana cuidando de una perra muerta, después de que muriera en un accidente de tráfico, en el pueblo ruso de Filippovka, en la región de Perm.
Su fiel amigo la arrastró desde la calzada al margen del vía y ha pasado una semana abrazándola y calentándola «como esperando que vuelva a la vida», según han relatado los vecinos.
Los han apodado Romeo y Julieta y aunque han intentado arrebatarle el cuerpo de la perra muerta para enterrarla, el perro no deja que nadie se acerque a ella. Una historia que ha conmocionado a todos los vecinos de este pequeño pueblo de Rusia.
Al verles no podemos reprimir las lágrimas”, comentó la residente local, Lyudmila Laisheva al diario ‘Lifenews’. Los niños trataron darle al can agotado algo para comer, pero rechaza todo, hasta las cosas favoritas para los perros, como huesos y carne.
También intentaron arrebatarle el cuerpo para enterrarlo, pero todo fue en vano: Este ‘Romeo’ aunque esté destrozado por la pérdida, gruñe a cualquiera que se atreva a acercarse a su amada. Una historia más que demuestra la fenomenal fidelidad de los perros y que recuerda a la de Hachiko, un famoso can que permaneció durante años en una estación de una localidad japonesa esperando el regreso de su dueño.